
En la noche de ayer Peñarol tuvo su segunda presentación en la Copa Libertadores, esta vez como local en “El Campeón del Siglo” ante Atlético Tucumán.
Peñarol comenzó el partido volcando el fútbol por la derecha donde Petryk y Nández se combinaban con la intención de buscar a Junior Arias y Mauricio Affonso por arriba.
Los tucumanos replegados, trataban de afianzarse en la cancha, marcar y no dejar brechas, esperando algún contragolpe que les diera la chance de inquitar a Gastón Guruceaga.
Fueron 15′ de muchas ganas y poco fútbol, sin llegadas claras y con poco peso en las áreas de los equipos.
El fútbol de los de Leonardo Ramos ya había cambiado de lateral y lentamente Lucas Hernández comenzó a tomar el protagonismo habitual por izquierda, pero tanto Arias, como Affonso eran controlados hasta el momento por la zaga visitante
La más clara llegó a los 43′ cuando el paraguayo Iván Villalba que estaba en el área tras una pelota quieta, recibió sólo ante Lucetti tras pase de Ramón Arias y definió, pero el golero adivinó su intención y ahogó el grito en el Campeón del Siglo.
El complemento comenzó con el mismo trámite que en el primer tiempo, ganas, intensidad, algún remate de media distancia pero poca claridad en los metros finales para poder desequilibrar.
Un cabezazo de Affonso desviado, cuando el estadio se levantó al unísono para impulsar al equipo, mostró las intenciones de los carboneros de adelantarse en el campo por tres puntos impostergables.
Ramos apostó al ingreso de Gastón Rodríguez por Junior Arias tratando de tener mayor presencia en cancha, ya que el ex Liverpool pasó desapercibido.Pero el partido se abrió a favor de los visitantes, cuando una gran jugada colectiva de Barbona y Aliendro terminó en un centro al área que encontró a Menéndez para vencer a Guruceaga y poner el 1-0 parcial.
La ventaja parecía ser una cuesta alta a recorrer para Peñarol, que lejos de eso se recuperó rápidamente con goles de Lucas Hernández y Mauricio Affonso para dar vuelta la historia.
Una falta sobre el Cebolla Rodríguez dio un tiro libre peligroso a favor de los aurinegros que Lucas Hernández remató y tras rebotar en la barrera se metió en la valla de Lucetti.
Y por si faltaba poco, Gastón Rodríguez mostró bastante de su talento, encarando por el centro del campo, caño incluido para quedar de cara al arquero minutos más tarde y su remate fue impulsado por Affonso para poner el segundo y la locura en el Campeón del Siglo.
(Fuente: Montevideo Portal).